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Diseño de Alto Vuelo

Richard Mille

Richard Mille y Airbus Corporate Jets (ACJ) lanzan una edición limitada de treinta ejemplares: RM 62-01 Tourbillon Alarma Vibrante ACJ. Se trata de un reloj inspirado en los vuelos exclusivos ofrecidos por ACJ. La pieza procura superar los límites de las funciones y el rendimiento. Todas sus características son maravillosas: es complejo, tiene materiales de calidad y su ergonomía es perfecta. RM 62-01 Tourbillon Alarma Vibrante ACJ, es el segundo modelo resultante de la colaboración entre Richard Mille y ACJ.

El objetivo del reloj es ser un objeto de uso diario pensado para los viajeros, por eso ha sido concebido para preservar la discreción en ambientes silenciosos. Capaz de despertar al viajero sin molestar a los demás pasajeros, la alarma es todo un hallazgo. Está diseñada para ser transmitida por vibraciones, algo posible gracias a un enfoque técnico inimitable. A simple vista esta complicación puede ser interpretada como una auténtica paradoja. Esto es así porque se considera a una alarma eficaz si se la puede oír a la distancia. En cambio, el alcance de la alarma de RM 62-01 Tourbillon Alarma Vibrante ACJ no supera unos cuantos milímetros. Se trata de una experiencia completamente diferente a la que ofrecen los despertadores y alarmas clásicas de la relojería, ya que RM 62-01 es silenciosa. Sólo produce una discreta vibración, imperceptible a una distancia superior a unos pocos centímetros. Su portador es el único capaz de notar que está activada, un detalle ideal para ser utilizado en una sala de reuniones o en una cabina de primera clase. Su fabricación presentó un enorme desafío, ya que la alarma no debía alterar el funcionamiento del movimiento. Para eso se dispuso una masa descentrada de oro macizo, semejante a un rotor de reloj automático inspirada en los antiguos vibradores de teléfono móvil. “Antes de configurar el movimiento completo se resolvieron varias cuestiones técnicas relacionadas con el hecho de llevar las vibraciones al corazón del movimiento. Fueron necesarios cuatro prototipos parciales y mucho trabajo con bocetos. Había que albergar 816 componentes, 2 barriletes, 7 agujas, 11 indicaciones y una jaula de tourbillon. Uno de nuestros fabricantes trabajó a tiempo completo durante cinco años, en ocasiones, ayudado por otro fabricante, con reuniones de seguimiento cada 15 días”, cuenta Salvador Arbona, Director Técnico de Movimientos de Richard Mille. Todo este proceso convierte a RM 62-01 en el reloj más complejo que la firma ha creado hasta el momento. Además de su extraordinaria alarma el reloj está dotado de la indicación UTC, que corresponde a un segundo huso horario y se muestra con una aguja verde en el centro. Bajo la esfera de zafiro transparente y a las 9 horas, el tourbillon posee un volante de inercia variable que oscila a una frecuencia de 3Hz. A las 12 horas puede leerse la fecha sobredimensionada indicada en la ventanilla roja a rayas. El movimiento tiene una reserva de marcha de 70 horas. El espacio destinado a las funciones de alarma es la parte inferior del reloj.

www.richardmille.com